La presencia del Espíritu Santo dentro del creyente
Las palabras de una persona nunca mueren. La influencia de esas palabras continúa viva aún después de que la persona muere. Pero no es así como la Biblia dice que Jesús está presente con el creyente hoy en día. El mismísimo Dios vive dentro del creyente en la persona del Espíritu Santo.