Regocíjate en el Señor
Cuando era niño, mi prima mayor dirigía a nuestra clase de escuela dominical. En un pequeño cuarto en la parte trasera de la iglesia, ella nos guiaba en el canto: “¡Tengo gozo, gozo, gozo, gozo en mi corazón! “¿Dónde!?” “En mi corazón.” “¿Dónde!?” “¡En mi corazón!1 A medida que creces, ¿no parece que el gozo …